Ana de Veciana es una mujer de mente inquieta y curiosa que se ha desarrollado en diferentes ámbitos profesionales. Se licenció en Marketing con ESIC y empezó trabajando en investigación de mercados de gran consumo. Su pasión por contribuir a un mundo más equitativo, la empujó a formarse y trabajar durante varios años en América Latina por los derechos de la infancia. Continuó con esta labor a su regreso a España, trabajando como consultora, evaluando programas de cooperación internacional financiados por entidades públicas y privadas.

Con UNICEF aprendió a amar la infancia y a entender la importancia vital que tiene en el desarrollo humano y siguió explorando esa pasión, formándose en pedagogías alternativas para crear un proyecto de madre de día junto con otra profesional de la infancia.

Las vueltas de la vida la han llevado en los últimos 7 años a hacerse cargo de la gestión de un olivar tradicional familiar, labor en la que se ha ido implicando cada vez más y que le ha permitido descubrir todo un mundo lleno de posibilidades, en el que no cesa de aprender. Además, le permite aplicar muchos de los conocimientos adquiridos durante sus años de trabajo tanto en la cooperación como en el mundo de la empresa.